9 mar 2009

ROSALÍA DE CASTRO


Rosalía de Castro nació en Santiago de Compostela el 24 de febrero de 1837 (La Coruña).
Pertenecía a la baja nobleza Gallega.
Rosalía de Castro se crió durante décadas con sus tías paternas En la aldea de Ortoño.
Algunos datos importantes de la juventud de Resalía de Castro es que a los 17 años, como principiante de las actividades del “Liceo de San Agustín”.
En esa época sabemos que le gustaba el dibujo, la música y la declamación, de hecho, participó como actriz en representación no profesionales.
Rosalía de Castro empezó a escribir cuando su marido no solamente le dio a la imprente sus cantares gallegos sino un constante impulsor de la obra de Rosalía.
Rosalía de Castro se relaciono en España con el que fue su marido Manuel Murguía.
L as tareas que desempeñó: Al principio vivió dedicada a su hogar a sus hijos y a su marido.
Su reconocimiento es que merece ser considerada, al lado de Gustavo Adolfo Bécquer como la precursora de la modernidad poética impulsada por la creencia en la pureza de formas e ideas, en la sinceridad, en el desnudamiento retórico y en la experimentación rítmica y métrica.
Murió en Padrón (La Coruña), el 15 de julio de 1885.
Otros datos importantes es que escribió obras en prosa como:
La hija del mar (1859)
Flavio (1861)
El cadi ceño (1863)
El primer loco (1881)
El caballero de las botas azules (1867)

APORTACIÓN DE ROSALÍA DE CASTRO


Feminismo- La primera generación de mujeres españolas que tuvo conciencia de sí misma como “mujeres españolas” apreció hasta 1841, justo en el momento de apogeo del movimiento romántico español y de una pequeña oleada de reformas liberales, dando voz a su experiencia de mujeres dentro de los términos de la ideología romántica. En 1839 el romanticismo español era exclusivamente masculino, como lo era en general toda la cultura impresa española. Ocasionalmente había aparecido en la prensa algún que otro relato breve o algún poema escrito por una mujer, pero nada parecía indicar que al cabo de pocos años las poetas fueron a encontrarse entre las figuras literarias más importantes de la época ni que las mujeres fueran a tener una presencia importante en la prensa general.
Hacia 1849 la publicación de cuatro novelas de Fernán Caballero, el éxito de la obra dramática de Gómez Avellaneda, Saúl el continuo ascenso del prestigio literario de Carolina Coronado, justo a la colaboración de de Concepción Arenal, Ángela Grassi y muchas mujeres menos conocidas en la prensa, dejaba bien claro que las mujeres habían conquistado un lugar significativo en la producción literaria.
En esta literatura escrita existe una inclinación conformista, pero no es menos cierto, que en las raíces de esta tradición hay un empuje opuesto de una conciencia rebelde y feminista. Esta última tendencia ya se manifiesta en el Discurso de Josefa Massanés, en el que expresa su buena disposición para cometer y justificar el “crimen” de reclamar la atención del público para sus obras, e insiste en obtener la aprobación de algún espacio en el que las mujeres puedan desarrollar su facultad intelectual.

Ecología- Rosalía mostró en sus libros gran amor por la naturaleza y denunció situaciones provocadas por el abuso industrial que hoy serían catalogados como atentados ecológicos.
Emigración- Vió con dolor la constante salida de Galicia de miles de personas en busca de una vida mejor. Eran los primeros emigrantes, a los que siguieron muchos más dejando atrás su tierra natal, embargados por característica de saludable gallega de la que Rosalía se convirtió en su más clara representante